Trata de responder a las inquietudes sociales, culturales, y politicos, de todo órden, que afecten al individuo en su más inmediato entorno, y que pueda reflexionar y responder, a las vicisitudes del momento histórico que le toca, vivir, disfrutar, y padecer como ser humano. Todas las entradas son artículos originales del administrador del blog,salvo los que se mencionan expresamente de terceros.Todos los derechos son reservados. Las opiniones de los blogs no son compartidas.
domingo, 9 de febrero de 2014
EN UN ALBUM
S obre la fría losa de una tumba;
un nombre retiene la mirada de los que pasan;
de igual modo, cuando mires esta página,
puede el mío atraer tus ojos y tu pensamiento.
Y cada vez que acudas a leer este nombre,
piensa en mí como se piensa en los muertos;
e imagina que mi corazón está aquí,
inhumado e intacto.
martes, 4 de febrero de 2014
SER HUMANO EN POSITIVO
Muchas veces nos excusamos de nuestros errores con la
siguiente frase:
“Hombre soy, y nada de lo humano, me es ajeno”.
Cuando contemplamos situaciones de injusticia,
atropello, marginación, decimos que son situaciones humanas que nos superan y
que las soluciones, están fuera del alcance de nuestras manos.
Fácilmente relacionamos lo humano con nuestras impotencias,
debilidades y vicios.
Pero humana es la inteligencia que nos hace buscadores de la
verdad y sedientos de la justicia.
Humana es la voluntad que nos empuja a luchar por un mundo
mejor que nos solidariza y que nos ayuda a sobreponernos a las desgracias.
Humana es la esperanza que nos hace esperar lo mejor de
nosotros mismos, que nos hace ansiar el Reino prometido por Jesús, y que se
manifiesta en nuestro día a día.
Por eso la verdadera gloria de los hombres y las mujeres es
llegar a ser realmente humanos, trascender los instintos y las limitaciones
propias de nuestra condición y abrazar la gracia que Dios nos ofrece con su Palabra, con su Amor con su Evangelio.
Solo así podemos decir con propiedad:
“Hombre soy, y nada
de lo humano me es ajeno”
Fuente: Ediciones Mensajero.
"Es una locura amar, a menos que se ame con locura".
Proverbio latino.
sábado, 18 de enero de 2014
Las veinte lecciones de la crisis financiera que debemos grabarnos a fuego
Las lecciones que podemos extraer de
la actual crisis financiera son innumerables y conviene tenerlas muy
presentes, grabadas a fuego. No en vano, las estadísticas dicen que las
grandes crisis mundiales suelen producirse con una intermitencia que se sitúa
entre los 10 y los 15 años. En la obra "Anatomía de una
crisis", recientemente publicada por Deusto, Aristóbulo
de Juan, Francisco Uría, e Iñigo de Barrón, hacen un repaso a
todo aquello que debemos aprender de esta crisis. Y estas son las
principales lecciones que hemos seleccionado.
1.- Las circunstancias macroeconómicas
pueden desencadenar crisis financieras de gran envergadura.
Por eso, es importante desarrollar dos tipos de supervisión, la macro y entidad
por entidad. Ambos tipos de supervisión deben funcionar en un marco
institucional estrechamente interconectado.
2.- La mala gestión y la pasividad
de los supervisores agravan las crisis. Un ejemplo muy claro lo
tenemos ahora, ya que esta crisis fue desencadenada por las hipotecas
'subprime' estadounidenses pero sus consecuencias se han visto agravadas por la
pésima gestión y la pasividad de los supervisores.
3.- La mala gestión conduce a un
crecimiento demasiado rápido y a la toma de riesgos desmedidos. Es lo
que los autores llaman "el opio del banquero". El crecimiento rápido,
que puede proceder de un exceso de liquidez, conduce a la euforia y a la
laxitud.
4.- En tiempos de bonanza, las entidades suelen ser
transparentes, pero cuando tienen problemas serios, los gestores
tienden a ocultarlos mediante el maquillaje de las cuentas. El
problema es que el maquillaje no resuelve los problemas y los gestores pueden
optar por la "huida hacia delante", embarcándose en operaciones
especulativas y de alto riesgo. En estas circunstancias puede aparecer el
fraude.
5.- Como resultado del maquillaje,
los peores créditos nunca están contabilizados como morosos. ¿Cómo es
posible? Mediante el uso de resquicios en la normativa, o bien incumpliéndolos
directamente. Uno de los principales instrumentos de camuflaje es la refinanciación
de operaciones inviables, pero también lo son la sobrevaloración de las
garantías o las acciones canjeadas por créditos.
6.- Las prácticas anteriores, que permiten
enmascarar patrimonio o resultados, se dan cuando la supervisión es inoperante
o tolerante. En tiempos de bonanza puede que no pase nada. Pero cuando
la economía empeora, esta estrategia puede ser suicida. Los problemas
se agravan y las soluciones se aplazan mientras crecen las pérdidas y la falta
de liquidez. Además, la tolerancia hace al supervisor cautivo de su pasado y le
impide adoptar cualquier política que ponga en evidencia sus errores del
pasado.
7.- La falta de liquidez de los bancos puede
deberse a problemas del activo, del pasivo o de ambos. El problema es que una
situación prolongada de iliquidez puede desembocar en una situación de
insolvencia oculta. Esta situación debe abordarse cuanto antes pues, de lo
contrario, se puede agravar la fuga de depósitos. Si la entidad no tiene
futuro, no debe recibir inyecciones de liquidez.
8.- Lo que cuentan son los flujos. Si existe
una masa de activos que no originan flujos de entrada reales, los recursos que
los sostienen sí que tienen un coste real que originan flujos de salida. Por
eso, la iliquidez y las pérdidas van en aumento. Y la
capacidad de crédito se congela. Puede darse el caso de que los bancos se
conviertan en "pirámides", donde los gastos generales y financieros
no se pagan con los ingresos obtenidos sino con los nuevos recursos que se
captan.
9.- Las situaciones de insolvencia nunca son
declaradas por el banquero. O casi nunca. Con frecuencia, tampoco las
identifica el auditor ni el supervisor hasta que la entidad se queda sin
liquidez. Entre tanto, se intenta salvar la situación con apoyos puntuales de
liquidez que no resuelven nada y prolongan la agonía.
10.- Cuando la insolvencia es profunda, se
dan varios niveles de pérdidas que se van desvelando sucesivamente.
Primero, las escasas pérdidas que declara el banquero; luego vienen las que
detecta el auditor, que puede doblar a las del banquero. Entonces, se encienden
las alarmas y llegan los inspectores, que detectan aún más números rojos hasta
incluso doblar la que han señalado los auditores. Y al final, se pone la
entidad en venta.
11.- Cuando los propios accionistas no
subsanan su falta de capital, el supervisor debe intervenir en
cuanto detecta un nivel suficiente de insolvencia en el que apoyarse
jurídicamente. El tiempo es oro y no debe esperar.
12.- Para evitar lo anterior, hace
falta una buena supervisión acompañada, además, de una buena
regulación. Esto no servirá de mucho si no hay mecanismos eficaces de
saneamiento y reestructuración.
13.- Si no existe un marco institucional
para actuar, se produce un efecto inhibitorio en el supervisor que puede llevar
a la parálisis. Si no dispongo de los medios para actuar ¿para qué voy
a actuar? podría llegar a preguntarse. También ocurre este efecto
cuando el gobierno no dispone de los recursos financieros convencionales para
abordar la situación y no quiere tomar medidas extraordinarias.
14.- Para que la supervisión sea eficaz, hay
que comprobar la salud de cada entidad "in situ". Esto puede
ser más importante incluso que la mejora de la propia regulación. Pero cuidado,
las pruebas de esfuerzo pueden ser instrumentos útiles, aunque no siempre. La
razón es que se basan en los datos que aporta la entidad, que suelen ser
engañosos. Por eso, estos mecanismos no deben sustituir a la comprobación
"in situ" sino complementarla.
15.- El agujero que supone la insolvencia de
una entidad solo se resuelve si es rellenado con capital fijo o mediante la
compra de un tercero de activos dañados en proporción suficiente y con la
asunción de la pérdida subyacente. Los préstamos y los avales pueden ser un
complemento, pero no un sustituto. Lo importante es reemplazar el
capital enfermo para hacer que el negocio sea sostenible y haya
compradores. La meta es poder olvidarse del problema no alargarlo.
16.- No existe la magia. Para resolver la
situación de insolvencia, alguien tiene que perder. Los
agentes llamados a sanear el capital son, por este orden: Los accionistas
existentes; los nuevos accionistas o inversores; una entidad con capital fuerte
y equipo de gestión; el resto del sistema financiero a modo de autoseguro; el
Gobierno, con recursos fiscales. No obstante, también pueden contribuir los
acreedores institucionales o incluso los bonistas, por ejemplo, mediante un
canje de deuda por acciones pero siempre que hayan sido bien informados de sus
derechos.
17.- Resulta incomprensible que se ayude a
los bancos pero la falta de acción puede poner en riesgo a todo el
sistema. Por ejemplo, una crisis sistémica interrumpiría los pagos o
haría perder dinero a los depositantes y terminaría por causar mayores pérdidas
al contribuyente. Pero se trata de salvar bancos, no banqueros o directivos de
las cajas.
18.- Mantener mucho tiempo como
responsables de la supervisión de un banco a los mismos inspectores o
auditores externos puede llevar a que sean demasiado comprensivos con los
supervisados.
19.- Si la insolvencia se resuelve en falso,
es decir, en caso de que la herida se cierre a medias, el
sistema resultante será frágil y puede quedar cuajado de entidades renqueantes
y con problemas. Esto puede dificultar el normal desarrollo del crédito. Y puede
convertir en crisis sistémicas anomalías que en principio no eran traumáticas.
20.- La voluntad política es indispensable para recuperar un sistema financiero robusto. En caso de no existir, los esfuerzos en regulación y supervisión serán totalmente inútiles. Y si el esfuerzo ya se ha realizado, habrá supuesto una pérdida de tiempo y un coste inútil.
http://www.finanzas.com/noticias/economia/20131101/veinte-lecciones-crisis-financiera-2535226.html#VwZ1ouxUt5qDHrAT
Fuente: Finanzas.com
viernes, 10 de enero de 2014
¿ES LA VOLUNTAD, ACTO MORAL, COMO PROPIEDAD DE LOS SUJETOS LIBRES?
Me
ha hecho mucha gracia que Kant considere la “voluntad”, como un "acto moral,
“per se”, sin otro motivo, que lo justifique. Y que además, “la voluntad”,
pueda ser considerada como una propiedad inherente. Para que un acto tenga esta
consideración debe ser ,- considerado- , “acto
bueno”. Creo que en Kant, existe cierta
miopía de pensamiento, al querer considerar, la voluntad, sin calificar, como
“acto moral”. Eso es, como decir, que si un
Vespino, de dos cilindros , va a 250Km/h, yo me lo creo, por que me lo
han dicho. Es un juicio “sintético”, que subordina el acto de la voluntad, como
justificado, “a priori”.
Por
“deber”, y por propia legitimación de la doctrina nazi, se nutrió del concepto
espúreo, de considerar, que los actos procedentes de la autoridad, tenían plena justificación , porque eran actos,emanados de la “voluntad”, de los que iban a ejecutarlos disociando ,así, la palabra, “deber”, de la “voluntad”. No son
sinónimos. La
“voluntad”, perteneciendo a la categoría de hombre libre, es un acto volitivo, que
puede estar exento del deber de ejecutar, si es contrario , al deber moral,que es el
acto que se realiza, por cuenta, de quien, muestra mandato, a que otros ejecuten, lo
que él no es capaz de hacer. Creo que es más importante el acto de “voluntad”,
(en cuento que entraña responsabilidad, en los resultados), que el que realiza
los actos, por "deber", esto es, por imperativo categórico. El segundo está exento
de responsabilidad, no así, el que ordena, emanando así “voluntad”. Me recuerda, a Leni Riefensthal, cuando hizo
aquel documental, sobre los juegos olímpicos, y retrataba, hedonísticamente las
ventajas del deporte, asignándole un título coincidente, de la filosofía
kantiana, con el triunfo en la palestra:
Las
doctrinas totalitarias, se han nutrido, de la filosofía kantiana, porque
consideraban que el triunfo de la ideología se iba a ejecutar como “acto
moral”. A la vez que se exoneraba, a los ideólogos de los resultados, por
cuanto que éstos, y los “ejecutores”,
describían caminos paralelos, pero no coincidentes, en sus actos, con los que en realidad los
llevaban a cabo. Así unos, quedaban exonerados, por “voluntad”, y otros por “deber”.
Habría que reescribir la Historia, para reconsiderar si, la “voluntad”, era emanado
del poder divino, (Absolutismo) y el “deber”, de ejecutar, hubieran sido considerados y exonerados también,
por ser “ actos morales”. Sería muy interesante.
lunes, 23 de diciembre de 2013
¡ZORIONAK! ¡FELICES NAVIDAD! ¡URTE BERRI ON 2014!
Desde aquí deseo realizar un llamamiento, a los responsables de nuestra economía, que si de verdad quieren y tienen los mejores deseos, para mejorar, el estado del bienestar de los españoles en general, no se lo carguen, el próximo año 2014. Es una verdadera lástima comprobar, como día a día, el panorama general sigue empeorando. No caben las buenas intenciones, solamente. Hace falta ponerse a trabajar en lo que verdaderamente importa.No cabe hacerse ilusiones, de que "el panorama está mejorando..."(?) (para quien diría yo ). No cabe escudarse, en "la confianza de los mercados...", porque al fin y al cabo, la prima de riesgo, lo pagan aquellos, que no tienen trabajo, porque de los factores de producción, que es el humano, prefieren prescindir de él. Porque es mejor pedirle al gobierno desde la siniestra patronal, que hay que "rebajar las cotizaciones salariales...", porque es el mejor antídoto, para conseguir empleo,(?). No cabe realizar ajustes en la Sanidad, y encima poner en marcha, el copago, porque encima, pagamos dos veces, por los mismos medicamentos. No cabe congelar los salarios de los funcionarios, que llevan la friolera de siete años, y encima los últimos dos años se les han congelado la paga de Navidad. No cabe decirles a los pensionistas, que deben ceder el diferencial del IPC, de cada año, a cambio de la sostenibilidad de la Seguridad Social, a razón de 3.430 M de €, por año, para garantizar el fondo, o la hucha, o fondo común, en diez años, después de haber utilizado ese mismo fondo de reserva, para comprar los bonos de la deuda soberana, para que bajase la prima de riesgo. No cabe fijar nuevos impuestos regresivos, que no ayudan, a mejorar la recaudación... Y así hasta un largo etcétera, etcétera...
lunes, 27 de mayo de 2013
LA REALIDAD ANTICIPADA
"Cuando advierta que para producir necesita obtener autorización de quienes no producen nada; cuando compruebe que el dinero fluye hacia quienes no trafican bienes, sino favores; cuando perciba que muchos se hacen ricos por el soborno y por influencias más que por el trabajo, y que las leyes no lo protegen contra ellos sino, por el contrario, son ellos los que están protegidos contra usted; cuando repare que la corrupción es recompensada y la honradez se convierte en un autosacrificio, entonces podrá, afirmar sin temor a equivocarse, que su sociedad está condenada."
AYN RAND (1950)
Apostilla:
Apostilla:
Yá lo dijo en su día, Juan Jacobo Rousseau:
“La “sociedad” pervierte al hombre”.
La condenación proviene de considerar a la persona como
un número, que significativamente hablando como sujeto estadístico, sea el reclamo perecedero, del político de turno.
¿ No les recuerda para nada el número de La Bestia? (Apocalipsis, 14,3)
Así ,todos los gregarios, y sus estómagos agradecidos, serán recompensados, mediante la adscripción a unas siglas determinadas. Ver mi enlace. No tiene desperdicio.
viernes, 17 de mayo de 2013
EL VALOR EUFEMISTICO DE LA LIBERTAD
A la entrada del campo de concentración de Auschwitz, se puede leer:
“ARBEIT
MACHT FREI” “
Triste SENTENCIA,
de quien esclaviza, y dá muerte, es al
mismo tiempo el que otorga "el pasaporte, de la libertad", o al igual que un “customer”
aduanero de la entrada, es el que pregona, que “una vez muertos, sereis
libres, y dejareis de sufrir”.
Extraño
sofisma no carente de significado, si no fuera por siniestro.
Me viene a la memoria, el de conciliar la
palabra “riesgo” , con la palabra “libertad”.
Dicen que no existe libertad sin riesgo, y es posible, que con el paso de los
años.
hayamos hipotecado la libertad, por la
seguridad.
Nos venden “seguridad” por todas partes, pero
hay algo que se nos escapa. “¿Qué pasa
con nuestra libertad?”.
Parece que la propia autonomía personal, se
vé mediatizada, por la impronta de que el
riesgo carece de valor, si no va acompañada,
de la correspondiente “seguridad”.
“Seguridad”, cuado vamos al volante de
nuestro automovil, “seguridad”,cuando vamos
en
bicicleta.
“Seguridad”, cuando realizamos un largo
viaje.
“Seguridad”, cuando viajamos en avión, etc.
“Seguridad”, en nuestra póliza de "Seguro de
Vida”. (únicamente para que nuestros deudos, la cobren. (Nosotros no cobraremos
nada, excepto, si sufrimos un accidente de trabajo, o por enfermedad).
¿ NOS HEMOS VUELTO MAS MATERIALISTAS CON EL PASO DE LOS
AÑOS, Y VALORAMOS
MAS EL RIESGO, EN DETRIMENTO DE NUESTRO LIBRE ALBEDRIO ?.
Asi
vemos que en la TV, programas de riesgo, (alta montaña, viajes “al fin del
mundo, etc). Y está claro que si aceptamos el riesgo es a compensación de que ese “riesgo”, para
nuestras vida, sea remunerativo. Por lo tanto, si aceptamos el riesgo, es siempre mediante “pago”. ¿ Está claro?.
Aquí les dejo, una muestra de cómo
se vivia en los años setenta y ochenta. Cosa impensable, en la actualidad. Pero la
pregunta es obvia.
Y la podeis encontrar, junto con la respuesta, “AL FINAL DEL CAMINO”. O sea, de "LA VIDA",
AL FINAL DEL CAMINO https://www.dropbox.com/s/gjxzvgkl1ez3nqm/Anos60_70_80%20%281%29.pps
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